Cuando se trata de identificar un producto, existen varias opciones: la impresión directa por serigrafía o la aplicación de una etiqueta autoadhesiva. Aunque la serigrafía ha sido preferida por muchas empresas durante mucho tiempo, hoy en día, la etiqueta autoadhesiva se ha consolidado como una solución más ventajosa. Más flexible, rentable y con un acabado de mejor calidad, los beneficios son numerosos.
Un acabado visual y unas funcionalidades más variadas
La etiqueta autoadhesiva ofrece una gran libertad de diseño. Gracias a las técnicas de impresión modernas, permite reproducir detalles finos, colores vivos e incluso efectos específicos como degradados, dorados y efectos de transparencia.
Otra ventaja de la etiqueta autoadhesiva, especialmente en el sector cosmético, es la posibilidad de incorporar etiquetas tipo folleto. Estas etiquetas son especialmente adecuadas para envases pequeños (donde el espacio es limitado) que tienen estrictas restricciones regulatorias, lo que requiere mostrar una gran cantidad de información.
Por lo tanto, la etiqueta autoadhesiva ofrece muchas más posibilidades que la serigrafía, tanto en términos de materiales, texturas como de funcionalidades.
Una solución más económica y flexible
La impresión en serigrafía requiere equipos específicos, tintas adecuadas y largos procesos de preparación (creación de marcos, limpieza, secado). Estas restricciones resultan en costes más altos, especialmente para tiradas pequeñas y medianas, lo que dispara los costos de producción.
La etiqueta autoadhesiva permite una producción más flexible y económica. En caso de cambio de normativas, productos o extensión de gama, ¡basta con adaptar el rollo de etiquetas con su impresor!
Nuestras máquinas de etiquetado autoadhesivo están diseñadas para adaptarse a diferentes formatos y tipos de etiquetas, lo que permite a nuestros clientes ser más reactivos y diversificar más fácilmente sus gamas de productos.
Por ejemplo, la Ninon Mix se adapta tanto a envases cilíndricos, cónicos, rectangulares como ovalados, manteniendo una cadencia fluida y una aplicación precisa.
Gestión simplificada de inventarios
Uno de los inconvenientes de la serigrafía es que obliga a producir en grandes cantidades para amortizar los costes de producción. Esto lleva a una acumulación de inventarios, lo que complica su gestión. La situación se vuelve aún más compleja cuando se deben realizar modificaciones en el diseño o en las menciones regulatorias.
Con la etiqueta autoadhesiva, es posible imprimir en pequeñas tiradas y modificar rápidamente los visuales según las necesidades del mercado. Esta solución es ideal para las empresas que desean ajustar su producción sin costes adicionales. Además, el etiquetado autoadhesivo también ayuda a reducir el desperdicio, lo que es un punto importante para las empresas preocupadas por su impacto ambiental.
Una colaboración esencial para un etiquetado exitoso
El buen funcionamiento de una máquina de etiquetado depende de una coordinación eficaz entre el cliente, el fabricante de la máquina y el impresor.
En CDA, acompañamos a nuestros clientes para asegurarnos de que la elección de la etiqueta cumpla con los requisitos técnicos y las expectativas en términos de acabado. Trabajamos a diario con muchos impresores, lo que nos permite anticipar posibles limitaciones.
Una elección estratégica para un etiquetado optimizado
La etiqueta autoadhesiva presenta numerosas ventajas frente a la serigrafía: ofrece una mejor calidad de impresión, reduce los costes, facilita la gestión de inventarios y se enmarca dentro de un enfoque más ecológico.
También puede encontrar entre nuestras máquinas llenadoras y taponadoras, ideales para realizar todas las operaciones de envasado complementarias al etiquetado. Una solución completa para optimizar su producción y mejorar la eficiencia.